¿Cuántas veces hemos oído a nuestro dentista recalcar la importancia de tener una buena salud oral y mantener una correcta higiene bucal? Una boca sana y en buen estado no solamente significa tener unos dientes bonitos y blancos, sino que va mucho más allá de una cuestión meramente estética.
Eliminar las bacterias que habitan en la cavidad oral es un trabajo de fondo que se consigue, principalmente, con una rutina de higiene dental efectiva combinada con visitas periódicas a la clínica para la pertinente revisión dental y oral.
La lengua, las encías, los labios o el paladar van a ser los encargados, en muchas ocasiones, de alertarnos si algo no va bien en nuestro cuerpo. De hecho, numerosos estudios han evidenciado la estrecha relación existente entre la salud bucodental y algunas enfermedades sistémicas.
Es por ello que, una detección temprana de ciertas anomalías en la boca, resulta fundamental para establecer un diagnóstico a tiempo y poder así poner en marcha el tratamiento más adecuado.
La periodontitis y la diabetes
La periodontitis es una enfermedad que tiene una influencia directa en las encías y en el soporte de los dientes. Se trata de una enfermedad dental que se agrava todavía más en pacientes diabéticos, siendo estos más propensos a padecer este problema.
Son dos enfermedades que forman un círculo vicioso ya que, para mejorar los síntomas y consecuencias de una de ellas, irremediablemente hay que pasar por tener controlada la otra enfermedad.
La salud dental durante el embarazo
Las mujeres embarazadas son más propensas a padecer problemas dentales durante este periodo de gestación, más aún cuando sufren tantos cambios hormonales y se aumentan los niveles de estrógenos y progesterona que terminan produciendo, en la mayoría de los casos, inflamación y enrojecimiento de las encías.
Cada vez más estudios afirman que existe una vinculación entre los problemas gingivales en embarazadas y el nacimiento de bebés prematuros y con un peso más bajo de lo normal.
Las endodoncias
Los tratamientos de los conductos vulgarmente conocidos como “matar el nervio” o en terminología odontológica “endodoncia” , están frecuentemente relacionados con pequeñas infecciones crónicas mayoritariamente asintomáticas que, a menudo, pasan desapercibidas a una radiografía convencional de rutina.
Sin embargo, son una fuente de bacterias y microorganismos que viajan por todo el cuerpo y pueden alojarse en varios órganos, entre ellos el corazón provocando pericarditis. Además, con el tiempo crecen y pueden adquirir grandes tamaños afectando a los dientes vecinos y destruyendo grandes cantidades de hueso.
Las infecciones crónicas requieren un sobre esfuerzo de nuestro organismo que intenta combatirlas continuamente gastando recursos energéticos y moleculares que pueden estar relacionados con cansancio crónico, dolores de cabeza, etc.
¿Cómo podemos saber si nuestras endodoncias están sanas?
Haciéndonos un TAC dental (CbCt ), en resumen, una radiografía 3D que nos permitirá estudiar las raíces de nuestros dientes y muelas en profundidad.
¿Qué soluciones hay si una pieza endodonciada tiene una infección?
Si la pieza se puede mantener, la primera opción es hacer un retratamiento. Sería la opción más conservadora y consistiría en eliminar los materiales usados dentro de la muela, desinfectarla y volver a hacer la endodoncia, buscando así eliminar posibles bacterias que se hayan infiltrado dentro de la pieza.
La otra opción sería la extracción de la pieza con la posterior colocación de un implante dental. Los implantes pueden ser de titanio, un metal totalmente biocompatible, muy utilizado y testado. Alternativamente, existen implantes de zirconio una cerámica de alta resistencia que es utilizada también para otro tipo de prótesis corporales. Lo ideal es visitar dos veces al año al odontólogo para revisar y asegurar que todas nuestras piezas están sanas.
La relación entre los problemas de corazón y la enfermedad periodontal
A día de hoy, las enfermedades periodontales como la gingivitis o la periodontitis, se han convertido en uno de los factores de riesgo en la aparición de enfermedades coronarias.
La acumulación de placa y bacterias en las encías provocadas por la infección gingival pueden llegar a pasar a la sangre, haciendo que se aumenten los niveles en sangre de bacterias que favorecen la aparición de problemas de corazón.
Alzhéimer y periodontitis, ¿existe una vinculación directa?
Según últimos estudios, se ha determinado que una bacteria que está asociada con la formación de enfermedades periodontales como la gingivitis o la periodontitis, podría ser la causante de que se aumente la predisposición de padecer Alzhéimer.
Los resultados que han arrojado estas investigaciones han concluido que se ha encontrado en el cerebro de los pacientes analizados bacterias relacionadas con la periodontitis.
En Øne Clinic nos tomamos muy en serio su salud. Es por ello que siempre aconsejamos a nuestros pacientes de Marbella que acudan, como mínimo, una vez al año a la consulta del dentista para poder realizar la revisión pertinente del estado general de su boca y descartar cualquier anomalía.